NUNCA: Cuando sales a comer o cenar con alguien, es de pésima educación empujar o pedir que retiren tu plato antes de que la otra persona termine.
BIEN: El objetivo es que terminen de comer al mismo tiempo. Si queda mucha comida en tu plato, ajusta tu ritmo y deja que la otra persona también hable.
MEJOR: Si el mesero se acerca y quiere llevarse tu plato, pídele que espere hasta que la otra persona acabe de comer. La educación hace la diferencia.