Quiero que sepan que la creación de la imagen orientada al éxito ha recibido gran atención en las corporaciones de Estados Unidos. Los ejecutivos corporativos son considerados por la sociedad americana como personas de éxito, y una prueba de ello son las autobiografías de CEO’s (Chief Executive Officer) que se han convertido en best-sellers (Pickens, 1987; Iacoca, 1984).

El incremento de estudiantes en programas de administración de negocios muestra el deseo de los jóvenes de imitar a este tipo de personajes. Los nuevos aspirantes a CEO se ocupan de su aspecto físico y de adquirir competencias en el manejo de la etiqueta. Incluso el otro día vi un anuncio sobre cómo dejar a los otros atrás mientras se escalan posiciones en la empresa.

Es claro que la apariencia tiene un gran impacto en la imagen y en el comportamiento. Estos efectos no duran mucho y tampoco garantizan el éxito, pero si no se tiene una buena apariencia se pueden cerrar las puertas.