En las relaciones laborales y sociales existe un protocolo constituido por códigos que algunas personas manejan de manera espontánea porque están naturalmente dotadas o porque tuvieron la oportunidad de aprenderlos. Para muchas otras, en cambio, el desconocimiento de esos códigos es una desventaja. El protocolo trata de saber ser y saber estar. Saber ser implica tolerancia, respeto, comprensión y tacto con los demás. Saber estar involucra ser cortés, tener buenos modales, ser educado, saber presentarse, saber andar, sentarse y utilizar correctamente los tratamientos.
Los estímulos derivados del comportamiento son la causa de la percepción que se convertirá en imagen. El protocolo tiene todo que ver con la imagen, puesto que es el resultado del comportamiento de los individuos.