La única manera de tener una buena imagen es gestionándola; algunos empresarios, políticos, celebridades y países lo han empezado a hacer para obtener beneficios en términos de diferenciación, o al menos evitar que sean sus competidores quienes los obtengan. La imagen es una característica universal, desde tiempos remotos se usa para lograr los objetivos más básicos del ser humano, pero es hasta mediados del siglo pasado que se gestiona con un método y con sustento en teorías de tipo psicológico, organizacional y relativas a la comunicación.
En palabras simples la imagen es la manera en que otras personas nos perciben y ello influye en sus decisiones en torno a:
- Estar de acuerdo con nuestras peticiones.
- Que nos contraten.
- Que nos paguen el sueldo que queremos.
- Causar una buena impresión o simplemente sentirnos bien con nosotros mismos, ganar seguridad y poder personal.
La gestión de la imagen es un tema que está en auge gracias a programas de TV como “No te lo pongas” o “Extreme Makeover”; dado que la imagen es más que la apariencia física, la gente también se forma impresiones sobre las conversaciones y el comportamiento de los individuos, así que un especialista en imagen pública no sólo puede asesorarte sobre cómo tener una apariencia física atractiva y apropiada en función de las diferentes audiencias y contextos, sino que también te asesora en comunicación verbal, lenguaje corporal y etiqueta social y de negocios.
Lo que respalda una imagen física atractiva es un comportamiento acorde con lo que visualmente se predica, de una autoimagen positiva emerge la energía motivadora que nos ayuda a triunfar en la vida; nos sentimos como creemos que somos. IQGV ayuda a las personas a presentarse de la mejor manera ante el mundo y a sacar la celebridad que llevan dentro. Acéptalo, tú mereces todo, tú mereces lo mejor.