La ropa puede ayudar a comunicar mensajes de poder, refinamiento y autoridad o todo lo contrario; el traje es la prenda indispensable para el ejecutivo global, ya que tiene la función sacar sus atributos a la superficie. Pero no todas las personas vestidas con traje transmiten ese mensaje, probablemente has visto hombres que causan la impresión de impotencia y sumisión. A golpe de vista podemos detectar a un hombre atractivo y bien vestido y también a un hombre que, a pesar de llevar puesto un traje, causa el efecto inverso.

En apariencia todo indica que es muy fácil entrar a una tienda y comprar un traje; en la realidad los vendedores no están preparados para asesorar a los clientes sobre los diversos detalles que hay que cuidar para elegir el traje perfecto. Observa tu entorno y notarás que los hombres que no lucen bien portando un traje se debe a una o varias de las siguientes razones incluido su lenguaje corporal: hombreras que no están en su sitio, largo inapropiado de las mangas del saco, largo inconveniente del saco en función de la estatura, pantalón grande o muy estrecho, fallo en la limpieza, falta de botones, así como una inadecuada elección del patrón y la textura de la tela, el color, el ajuste del cuello, el tamaño de las solapas, la calidad y los accesorios, incluidos los zapatos. Para seleccionar el traje adecuado toma en cuenta aspectos que suelen pasarse por alto como estos:

• Un buen saco comienza en los hombros, pues son la guía para una buena figura.
• Evita solapas muy anchas, tampoco vayas al extremo de usarlas súper angostas, las solapas deben guardar proporción con tu cuerpo.
• Toma en consideración los botones en las mangas del saco, generalmente son de ornato; si tienes que ajustar el largo cuida que también concuerden los botones para que se vea un terminado fino.
• Las rayas y los cuadros son los patrones más comunes en las telas de traje; en una prenda bien elaborada las líneas donde se unen las piezas coinciden perfectamente; si no es así, indica que se te están vendiendo una prenda mal terminada y con baja calidad.
• La mayoría de los sacos traen las bolsas cosidas, ábrelas pero no las llenes de objetos como llaves, teléfonos o monedas porque los deforman.
• El largo del saco es un detalle muy importante, puede trabajar a favor o en contra; si eres de baja estatura lo mejor es que no lo compres muy largo porque acortaría visualmente tus piernas; lo que va en contra de una figura estilizada.
• Es común que algunos trajes fabricados en serie unan las piezas con entretela, la cual fusionan con calor para lograr una apariencia firme en la zona del pecho; el problema es que al enviarlos a la tintorería con el vapor se despegan los tejidos formando burbujas de aire que demeritan la prenda.
• El ajuste es fundamental tanto para hombres delgados como gruesos.

La moda masculina está basada en la calidad y en los detalles, y un buen traje puede ayudar a que la gente te perciba como un hombre poderoso. ¿Quieres saber cómo es el traje correcto? El traje correcto tiene que ser confortable y con un buen corte, que realce tu figura y forme la silueta que desearías tener desnudo.

UBER es una organización que ofrece empleo a personas que quieren ganar dinero usando su auto como taxi. Pues bien, todas las personas que ofrecen sus servicios por Internet se ven en la necesidad de cuidar más que nunca su reputación debido a que los usuarios los califican y dependiendo de su evaluación van ganando prestigio y, por ende, más clientes y dinero.

Ayer hubo demostraciones de protesta contra los servicios de UBER en la Ciudad de México, los manifestantes bloquearon calles y la gente no pudo llegar a tiempo a su trabajo y citas; en respuesta Uber ofreció servicio gratuito durante todo el día. ¿Quiénes ganaron la buena voluntad de los ciudadanos? La reacción de Uber provocó la simpatía de una buena parte de la gente debido a que está fincando su reputación en valores de siempre como la cortesía, la honradez, la limpieza, la puntualidad y la calidad, entre otros. La magia y el secreto detrás de los mercados de consumo de colaboración es el poder para construir confianza entre los desconocidos y es precisamente la reputación la que está transformando la forma de relacionarnos.

Antes nuestra reputación era conocida solamente por nuestra familia, amistades, compañeros de trabajo y vecinos; hoy lo que hacemos, decimos y publicamos en las redes sociales puede llegar a los lugares más insospechados. Vivimos en la economía de los intangibles y la reputación es el activo de mayor valor para muchas compañías como UBER.

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